Un implante de barba consiste en la implantación de folículos en la zona de la cara en la que habitualmente está la barba. Es un proceso que se realiza normalmente para zonas de la barba con calvas, con poca densidad o incluso por una razón estética, para tapar alguna cicatriz o simplemente porque queremos tener una barba más poblada para sentirnos mejor con nosotros mismos.
El proceso de un implante de barba es similar al trasplante de pelo, es decir, mediante la extracción de folículos pilosos de zonas en las que el pelo no sufre calvicie ni enfermedades. Normalmente en un implante de barba, el pelo se obtiene de la zona de la nuca o los laterales de la cabeza, e incluso de otras zonas con barba abundante o del pecho (algo menos habitual). Pero veamos detenidamente como es dicho proceso.
Proceso implante de barba
Igual que en cualquier tipo de injerto capilar, ya sea en hombres o en mujeres, se trata de una operación ambulatoria, por lo que no hace faltar ingresar y podemos irnos a casa al finalizar. La intervención puede llegar a las 3 o 4 horas en España, pero en Turquía incluso a las 2 horas podría estar finalizada.
Antes de comenzar la intervención, se aplica anestesia local en la zona donante y en la zona receptora. En algunos casos también se aplica sedación, para evitar movimientos que puedan dificultar el implante. A partir de ahí comienza la operación. En el caso de un injerto de pelo se utilizan varias técnicas diferentes, pero en implantes de barba no ocurre lo mismo.
La técnica utilizada en un implante de barba, es la técnica FUE (Follicular Unit Extraction), es decir la extracción unitaria de cada folículo, para después realizar el injerto en la zona receptora. La extracción, como ya hemos comentado, normalmente se realizará en la zona occipital de la cabeza, es decir, la nuca, y también en las zonas laterales. Una vez extraídos los folículos se implantan directamente en la cara (en la zona previamente marcada y decidida por médico y paciente). Dichos implantes de barba se realizan mediante pequeñas incisiones, tal y como explicamos en el proceso del injerto capilar, aunque en implantes de barba el folículo debe ser introducido a una mayor profundidad, por el tipo de dermis de la cara.
Cuidados posteriores al implante de barba
Posteriormente, al ser una intervención ambulatoria, podremos volver a nuestra casa u hotel y comenzar la recuperación. En el periodo posterior al implante de barba, tendremos que cuidar la zona, no tocarla en los primeros días, dormir boca arriba para evitar roces en la zona afectada, no tomar medicamentos anticoagulantes ni aspirina, no tomar el sol, etc. Para que conozcáis todos lo que hay y no hay que hacer en este periodo, echad un vistazo al artículo “Principales cuidados después de un injerto capilar”. Estos consejos son aplicables a injertos en la barba. Aún así podemos consultar con nuestra clínica las recomendaciones y los plazos.
En cuanto a los plazos del crecimiento del pelo tras un injerto de barba, si hay ciertas diferencias con respecto a los trasplantes capilares en la cabeza. El injerto en la barba suele completarse a los 6 meses, justo la mitad que en el cabello, que se alarga hasta el año. Aunque las fases de crecimiento del pelo son similares en todo el cuerpo, la gran diferencia radica en la dermis.
Injerto de pelo mediante extracción en barba y pecho
Este es un caso menos habitual, y es aquel en el que los folículos implantados en la cabeza, son extraídos de la barba o el pecho. Se puede dar en caso de tener en la cabeza una zona donante ‘pobre’ mientras que la barba y el pecho están más poblados.
La intervención es más complicada y por tanto más duradera. Además la cantidad de folículos implantados será menor al estándar de los injertos de pelo en los que se extraen los folículos de la propia cabeza.