La alopecia areata es una enfermedad que produce la caída del pelo en una zona concreta y focalizada del cuerpo, creando una pequeña calva, normalmente con forma redonda. Suelen producirse en la cabeza o la barba y afecta tanto a hombres como mujeres. Normalmente se produce en personas jóvenes (menores de 30 años), produciéndose incluso en niños y adolescentes.
La gran diferencia con otras alopecias es que la zona afectada es una zona sana, por lo que la piel tendrá un aspecto normal. No se producen rojeces, ni inflamaciones, ni descamaciones.
En este artículo vamos a ahondar más en este tema y veremos qué tipos de alopecia areata existen y cuáles son sus causas, sus consecuencias y posibles tratamientos. Además, queremos contaros qué tipos de alopecias existen, ya que que la alopecia areata es una de las menos comunes, que afecta aproximadamente al 2% de la población.
Tipos de alopecia areata
Hay varios tipos tipos de alopecias areatas, que se diferencian por cómo y con qué gravedad afecta esta enfermedad al cuero cabelludo o el resto del cuerpo:
- Alopecia areata en placa única: solo afecta a una zona concreta, generalmente en el cuero cabelludo, y es de tamaño reducido normalmente. Es el tipo más común de alopecia areata.
- Alopecia areata en placa múltiple: es un tipo similar al anterior, ya que las placas o calvas que se crean son similares. Sin embargo, en este caso se producen varias placas que incluso pueden llegar a unirse formando placas mayores.
- Alopecia areata total: es mucho más extendida y provoca la pérdida del cabello en todo el cuero cabelludo, produciendo por tanto una calvicie completa.
- Alopecia areata universal: se trata de una alopecia generalizada en todo el cuerpo, no solo en la cabeza. Incluso puede extenderse al vello de las axilas, el pubis, las cejas y hasta las pestañas.
- Alopecia areata difusa: es un tipo poco frecuente. La pérdida de cabello es difusa, es decir, no está localizada en una placa o calva concreta y es difícil de detectar.
- Alopecia areata para el cabello oscuro: es más inusual aún que la anterior y que el resto de tipos. Esta alopecia se caracteriza porque el cabello que se cae, que se pierde, es del color natural de quien lo sufre. El cabello pigmentado o canoso no se ve afectado. La impresión de lo que ocurre es que el cabello canoso se ha extendido brusca y rápidamente en poco espacio de tiempo. Suele producirse por haber sufrido un periodo de fuerte estrés.
Una vez vistos los diferentes tipos de alopecias areatas, vamos a ver las causas generales de su origen y los tratamientos que se pueden llevar a cabo para remitir o eliminar este problema.
Causas y tratamientos para la alopecia areata
La alopecia areata es una enfermedad cuyo origen no está definido, ya que no tiene solo uno, sino que son varios factores los que pueden provocarla. Por ello se considera una alopecia de origen multifactorial. En ocasiones se considera que existe una predisposición genética ya que es habitual que existan antecedentes familiares. Pero no siempre existen estos antecedentes.
Pero sobre todo, está demostrado que tiene una gran incidencia en el sistema inmunológico, ya que esta enfermedad desarrolla mecanismos autoinmunes, acumulando linfocitos T CD8 alrededor de los folículos pilosos afectados. Esto provoca que se paralice el desarrollo de estos folículos y que posteriormente se caigan.
Los genes implicados en esta alopecia también están asociados a otras enfermedades autoinmunes como la enfermedad celíaca, la diabetes o la artritis reumatoide. Incluso la alopecia areata puede ser la única manifestación para un celíaco, de su enfermedad cuando aún no está reconocida o diagnosticada.
La alopecia areata es una enfermedad que no tiene consecuencias graves de forma física, aunque puede llegar a serlo desde un punto de vista psicológico. De hecho, es habitual que se alternen periodos de mejoría con periodos de empeoramiento. Algunas personas presentan sólo una o dos calvas tras la pérdida del cabello, pero en muchos casos vuelve a crecer espontáneamente en un periodo de tiempo inferior a un año. Sin embargo la evolución de la enfermedad es impredecible y muy variable.
Según los estudios que se han realizado, el 50% de los pacientes recuperan el crecimiento del cabello en la zona afectada en menos de un año sin ningún tipo de tratamiento. Alrededor del 10% de los enfermos tienen afectación severa o muy severa.
En cuanto a los tratamientos, dependen fundamentalmente del tipo de alopecia areata y lo extendida que esté. Cuando las lesiones son parciales o poco extensas suelen emplearse productos tópicos, como por ejemplo el Minoxidil. Pero también cremas o champús con cortiesteroides, antralina o terapias combinadas con varios productos.
Cuando las lesiones son más extensas pueden llegar a utilizarse los tratamientos anteriores pero sumando terapias con láser, corticoides, tratamientos biológicos o inmunosupresores.
En los casos en los que la alopecia areata aparece asociada a la enfermedad celíaca normalmente se recupera, parcial o completamente, con la dieta sin gluten habitual para los celíacos. El cabello o el vello corporal perdido puede recuperarse, volver a crecer y que no se produzcan recaídas.
Otros tipos de alopecia
Existen muchos tipos de alopecia, algunas más comunes que otras. Cada una tiene un origen y tratamiento distinto y vamos a ver cada una de ellas. Para agruparlas, las separamos en alopecias cicatriciales y no cicatriciales:
Alopecias NO cicatriciales
En este grupo se encuentra la alopecia areata que ya hemos definido. Por lo que procedemos a ver el resto:
- Alopecia androgénica: también llamada alopecia androgenética. Es el tipo de alopecia más común. Puede aparecer tanto en hombres como en mujeres, pero es más habitual en el sexo masculino, y también más acentuada. Este tipo de calvicie aparece de forma general entre los 30 y los 40 años, aunque en muchas ocasiones se sufre antes de los 30 o incluso durante la adolescencia.
La causa de la alopecia androgénica es genética. La hormona DHT (Dihidrotestosterona) afecta a los folículos pilosos en el cuero cabelludo y provoca que poco a poco estos folículos vayan creciendo más finos y lacios, facilitando su caída y, por tanto, su pérdida. Y no solo se cae el pelo, si no que deja de crecer.
En cuanto a la diferencia entre hombres y mujeres, en los hombres suele comenzar en las entradas de la frente y la coronilla, para extenderse posteriormente por toda la zona delantera de la cabeza. En las mujeres suele extenderse de forma más generalizada y no tan fuerte. Normalmente no deja de crecer todo el pelo, si no en ciertas partes.
- Alopecia traumática: son alopecias puntuales y poco habituales que pueden producirse por una asiduidad en peinados fuertes como coletas o trenzas muy tirantes y muy pegadas al cuero cabelludo. En esas zonas en las que se aplica mucha tensión pueden llegar a aparecer calvas. Dentro de las alopecias traumáticas también encontramos la provocada por la tricotilomanía. Esta es una enfermedad en la que la propia persona se arranca el pelo, debido a alteraciones de ende psicológico.
- Efluvios telógenos: se trata de caídas puntuales y temporales del pelo cuyo origen puede ser muy variado. Pueden producirse en determinadas épocas del año, por cambios hormonales, por alguna enfermedad, como una infección o problemas de tiroides, y en algún caso se produce por determinados fármacos o por un tratamiento de quimioterapia.
Alopecias cicatriciales
Este tipo de alopecias vienen provocadas por una enfermedad o los tratamientos a los que nos sometemos para su cura. Se producen cuando parte de los folículos pilosos son destruidos (por una radioterapia por ejemplo) y el tejido dañado termina formando un tejido cicatricial.
- Alopecia frontal fibrosante: en este casa hablamos de un tipo de alopecia en la que la caída del cabello se produce de forma generalizada, produciéndose desde la frente hacia la parte trasera de la cabeza, es decir, desde delante hacia atrás. Se caracteriza porque la zona afectada tiende a volverse más pálida y fina. Afecta tanto a hombres como a mujeres.
Dentro de este tipo de alopecia la más habitual es la alopecia frontal fibrosante postmenopáusica. Suele producirse durante la menopausia o en el periodo posterior a la misma, y se desconoce su causa, aunque se cree que es multifactorial, ya que influyen factores hormonales, genéticos e incluso pueden llegar a influir determinados cosméticos.
Liquen plano pilaris y Lupus eritematoso: son enfermedades que dan lugar a alopecias permanentes y que no se pueden tratar. Se trata de alopecias muy poco frecuentes.